Ayer fué el aniversario de la Constitución, y como cada 6 de Diciembre nos encontramos con celebraciones y datos de todo tipo: los que ensalzan el consenso que ésta supuso para intentar aplicarse el cuento en los tiempos que corren, los que se hacen propietarios de su defensa (véase la manifestación que hizo el PP el año pasado, donde, en mitad del debate del Estatut, se creían los únicos dueños de la Constitución), los que aprovechan el momento para recordar que está desfasada y toca reformarla (algo más que cierto), o datos como que esta autoridad no ha venido o ésta ha venido por primera vez en muchos años. También nos encontramos a la habitual minoría que se manifiesta libremente oponiendose a la misma argumentando varias simplezas.
Dicho esto, podemos ver el estado en el que nos encontramos, la mayoría pensando que la Constitución del 78 fué lo mejor que le ha pasado a este país en siglos pero dentro de esa mayoría muchos pensamos que toca ponerla al día. Creo que eso es algo que cae por su propio peso:
- La Constitución del 78 abría las puertas al autogobierno de las Comunidades Autónomas, y aún no se ha actualizado para establecer el punto en el que estamos de descentralización del Estado.
- En la Constitución del 78 Europa empezaba en los Pirineos, ya que aún nos quedaban unos añitos para entrar en la UE. Por cierto, antes de 1992 tuvo que ser modificada para poder adaptarse al Tratado de Maastricht, aunque solo se cambió un artículo que facilitaba el sufragio pasivo a los ciudadanos comunitarios. 
- En la Constitución del 78 las nuevas tencologías se limitaba a las máquinas de escribir, obviamente nadie conociía la palabra "Internet".
- La inmigración se entendía como un fenómeno en el que los españoles emigraban a otros lugares, y no que gentes de otros lugares vengan aquí en busca de un futuro mejor.
- La Constitución del 78 fué fruto del consenso de franquistas y antifranquistas, un pacto necesario para llegar a la democracia pero forzado, por lo que se dejaron a un lado reivindicaciones que parecían imposibles de conseguir puesto que salíamos de un larguísimo régimen fascista.
Ahora, 28 años después, los que no vivimos esa época, los que nuestro pasado, presente y futuro está en el siglo XXI nos vemos con la obligación de pedir un reforma de la Constitución que se adapte a nuestros tiempos y que pueda recoger esas reivindicaciones que antes parecían imposibles. Para los inmobilistas peperos estas reformas les asusta porque les alejaría un poco más del franquismo que tanto disfrutaron. Para aquellos que no les importa la justicia social basarían esas reivindicaciones en el derecho a la autodeterminación, un derecho que solo puede exisitir para antiguas colonias, pero que nutre algunos discursos.
Pero para los jóvenes progresistas de toda España estas reivindicaciones se deben basar en puntos muy importantes para avanzar en la justicia social, que enumero a continuación, aunque seguramente me deje algunos.
- Obviamente deben actualizarse todos los puntos que antes enumeraba.
- Debemos dirigirnos hacia un país laico, sin menciones a la Iglesia católica.
- Debemos avanzar en la memoria histórica, ya que la transición ya está totalmente superada como para poder hacer justicia a todos los que perecieron durante el franquismo.
- La España de las Autonomías debe avanzar hacia una España federal.
- Y por último, y no por ello menos importante, debemos superar la Monarquía, una institución totalmente acrónica y que con ella nos impedimos profundizar en la democracia de la que tanto alardeamos.
Y bién después de toda esta chapa, que mejor para visualizar todo esto que este gag que he encontrado:
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